Mérida, Yucatán.-El karma existe. Al menos, eso puede entenderse de la situación de una persona que luego de robar una bicicleta estacionada en el parque zoológico huyó a bordo de ella, pero a unas pocas calles un taxista lo atropelló.
Este suceso, fue registrado por la policía en la calle 65-A entre 84 y 86 de la zona centro de la ciudad, aproximadamente a las 2.30 de la tarde.
Como si fuera una secuencia de una película cómica, el dueño de la bicicleta y personal del zoológico perseguían al ladrón, hasta que sorpresivamente un vehículo de alquiler lo atropelló.
Los vecinos de la zona se acercaron para ayudarlo, mientras que el propietario de la bicicleta pretendía golpearlo. Apenas pudo hablar y dijo que no estaba robando la bicicleta sino que había tomado una por confusión.
Ahora, además del robo fallido y lesiones en el cuerpo, tendrá que pagar la multa o permanecer en la cárcel por el tiempo que dice la autoridad judicial.
